Por Mauricio O. Montoya
Fue su amor una lágrima, que mendigó mi alma
Y no tuvo reparo, pues nunca la encontré
La quise como esclavo y a ciegas la buscaba
Y sufriendo esta pena, sin su amor me quedé
Lloré hasta que de secos, mis ojos se cerraron
Y mis oídos sordos, no escucharon su voz
Me volví en peregrino, de una pasión maldita
Que la vida hoy me quita, fehaciente y atroz
Triste melancolía, hoy embarga mi pecho
Desangrando en angustia, todo mi corazón
Fue su amor esa perla, que mi ser adoraba
Mas de ese amor no hay nada, tan solo esta ilusión
Elevo una plegaria, con mi voz ya marchita
Quizá el eterno evite, que muera sin poder
Abrazarla a mi pecho y con un beso darle
La pasión que guardaba, este humilde querer
He renunciado a todo, muero sin esperanza
Ya no tengo más vida, no he de volverla a ver
El no tenerla cerca, se volvió mi agonía
Y muero mendigando, su amor y su querer
Aquí les comparto un poco de mi poesía, Espero que la disfruten y están en la libertad de que la compartan con quien quieran. Atte. Danadith Tayals
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martes, 6 de octubre de 2009
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